Últimamente puedo decir que me he portado muy bien con respecto a lo que a vida sana se refiere. He dejado el café ya durante suficiente tiempo como para poder decirlo sin que se rían de mi. He nadado, corrido y lo más importante: he comido todo lo sano que se puede comer. Los frutos de este esfuerzo no se han hecho esperar.
Como prueba de esta aproximación a la vida, os muestro una fotografía. Esta foto es el testimonio de como se puede ir a un sitio de comida rápida donde el plato más light tiene dos millones de kcal, y conseguir que el camarero te traiga lechuga de postre. Si es que querer es poder.
Y a partir de mañana...¡A volver a correr hasta la Provi en Gijón!
Y a partir de mañana...¡A volver a correr hasta la Provi en Gijón!
No hay comentarios:
Publicar un comentario